Me preguntó un piadoso hombre de Manchester qué deben hacer concerniente a las cuatro especies, las cuales son muy difíciles de
conseguir en estos tiempos de guerra que nos aquejan hoy en día. Si es posible hacer las agitaciones con las especies que están a la mano como el sauce y el mirto. Y también
preguntaron si éstas requieren berajá.
En los países de Europa que son fríos y húmedos es imposible encontrar lulavim y etroguim. Pero el mirto y el sauce es muy fácil
conseguirlos. Y cuando los años transcurren sin problemas ni conflicto es muy fácil conseguir las cuatro especies importándolas de la Tierra de Israel o de las ciudades de América o
de las tierras orientales (Marruecos). Pero ahora que ha comenzado la guerra y las rutas comerciales han sido interrumpidas, ya sea por mar o por tierra, es muy difícil conseguir
estas cuatro especies. Especialemente, es de notar el año de 5701 (1941) donde todas las sinagogas (en Inglaterra) rezaron en la fiesta de Sukkot sin estas cuatro especies. Y
escuché que sólo unos cuantos individuos pudieron conseguir las cuatro especies desde América con grandísima dificultad, y en este año de 5702 (1942) las sinagogas locales sólo
consiguieron un lulav seco y un etrog inválido por el precio de 10 libras esterlinas, y con esto se asociaron las dos sinagogas sefaradíes de este lugar y cuando terminaron las
agitaciones en la sinagoga grande enviaron las cuatro especies a la sinagoga más pequeña.
Y esta es mi respuesta: dado que cada una de las cuatro especies es necesaria para el cumplimiento de la mitzvá y es sólo cuando están todas
juntas que se les llama la mitzvá de "lulav", cuando falta una de las especies es imposible reemplazarlo con una especie parecida a ésta. Y esto es obvio. Igualmente es imposible
tomar alguno de estos sin tomar el resto, como aprendemos del Rambam (Hiljot Lulvav 7.6) y del Tur y del Shulján Aruj (Oraj Jaim 651). Pero es posible tomar las especies que
tenga a la mano ya sea el mirto o el sauce o las dos juntas y tomarlas como un RECORDATORIO exclusivamente. Y no bendecirá sobre ellas ni en el primer día ni en el resto de
los días del festival.
Y sobre aquello de sacudirlo, sobre ello están en desacuerdo el Turé Zahav (Rabbi David Halevi Segal) y Rabbi Shelomo Luria. Ya
que de acuerdo al primero no se necesita agitar estas especies ya que son un mero recordatorio. Y para el segundo, en sus teshuvot, decretó que el Shalíaj Tzibbur agitará lo
que tenga de acuerdo a las costumbres durante el Hallel, eso sí sin bendición. Y en las teshuvot del Mohoril (Rabbi Yaakov Molin) dice que agitará de acuerdo a su costumbre
durante el Hallel pero sin berajá como el resto de los días. Pero los demás (miembros de la sinagoga) no tomarán estas especies ya que tememos que esto lleve a que las tomen en otro año y
hagan la berajá sobre estas. Ver el Beer Hetev (s.k. 22 ad locum) y los Tosafot sobre este particular (vid Menajot 27, "ulkajtem").
Extraído del libro Keter Shem Tov del Rabino Shem Tov Gaguine z''l (Gran rabino de la congregación hispano-portuguesa del Reino Unido), vol. 7, pp. 86-87
Traducido por el Rabino Juan Mejia